martes, 27 de agosto de 2013

Estimados sinfollowers


Tan global es esta aldea que a Miley Cirus le gusta el choque. Todo queda tan cerca que es muy fácil trasladarse, por eso a Miley la invitaron a bailar champeta y tú estás usando una ruana hoy. Pasar de un lado a otro; de la ignorancia al activismo; de la calle 85 a la Plaza de Bolívar, y del uribismo a la condolencia es pura convergencia de medios, porque la prioridad es registrar un nuevo checkpoint en Foursquare.

Quédense en sus casas. No compren pilas para sus cámaras. No saquen del baúl de la abuela la ruana. Dejen las cacerolas quietas, para los huevos de mañana. Tranquilos. Starbucks no tarda. En silencio decidan qué filtro van a usar para la foto del vasito, y poderla subir, llena de numerales, a Instagram.

Ustedes, plásticos, que sin saberlo se perfuman con la desigualdad social, con la injusta distribución de oportunidades y con la falta de educación, para que una chica plástica los huela y diga para sus adentros: “Oh, qué muchacho tan consciente. Plop plop plop”. Sí, ustedes, qué fallo. 

Desde esos días en los que vomitaban tiernamente la papa criolla y lloraban, hasta que les acercaban las importadas, el ESMAD ha matado “campesinitos”Libertad es lo que tienen para sacar la cacerola, siempre y cuando su mamá les dé permiso. Si lo hacen, si no ven otra forma de llamar la atención de esa chica, por favor no se queden ahí. Hagan algo más que tomarse fotos en ruana. Eso ya es muy mainstream. Sigan el ejemplo de Miley, que no solo bailó. Hizo mucho más.